TikTok emitió un comunicado anunciando la restauración de su servicio en los Estados Unidos, agradeciendo al Presidente Trump por asegurar que sus proveedores no enfrentarán sanciones al mantener la aplicación disponible para más de 170 millones de usuarios estadounidenses.
El servicio había sido suspendido debido a una ley que prohibía TikTok, pero Trump prometió emitir una orden ejecutiva para retrasar su aplicación, lo que permitió que la plataforma regresara antes de que la orden fuera firmada oficialmente.
Este movimiento también representa una victoria política para Trump, al ser visto como el responsable de devolver la popular plataforma, que es esencial para millones de estadounidenses y pequeñas empresas.