
Roma, 22 de febrero de 2025
El Papa Francisco se encuentra en estado crítico en el Hospital Gemelli tras haber sufrido esta mañana una crisis respiratoria asmática prolongada, según informó la Oficina de Prensa de la Santa Sede. La situación, que mantiene en alerta a los responsables sanitarios, ha requerido el uso de oxígeno de alto flujo y la realización de análisis de sangre de urgencia.
Un diagnóstico complejo
Los exámenes de hoy han revelado la presencia de plaquetopenia asociada a anemia, lo que obligó al equipo médico a administrar hemotransfusiones al Santo Padre. A pesar de encontrarse consciente y alerta, el Papa pasó el día en un sillón, reportando un incremento en la sensación de dolor en comparación con el día anterior. Las autoridades vaticanas reiteraron que, a pesar de los cuidados intensivos, su estado sigue siendo crítico y el diagnóstico se mantiene reservado.
Reacciones y declaraciones oficiales
En el comunicado difundido por la Oficina de Prensa, se recordó que “el Papa no está fuera de peligro” y que se mantienen todas las medidas para garantizar su estabilidad. Esta actualización se suma a la información proporcionada en días previos, lo que subraya la seriedad de la situación.
Actualización y expectativas
Hasta el momento, no se han encontrado nuevas actualizaciones en fuentes oficiales que modifiquen la información conocida. Los medios y la comunidad internacional esperan con atención nuevos comunicados que esclarezcan la evolución del estado de salud del Pontífice. Mientras tanto, la Santa Sede reafirma su compromiso de mantener informados a los fieles y a la opinión pública sobre cualquier cambio significativo en su condición.
Contexto e impacto
El prolongado estado crítico del Papa Francisco ha generado inquietud entre la comunidad global y los fieles, quienes aguardan noticias que permitan vislumbrar una mejora en su salud. La administración de oxígeno de alto flujo y las transfusiones de sangre son parte de las medidas de soporte intensivo aplicadas para estabilizar su situación. La situación sigue siendo monitorizada de cerca por el equipo médico del Gemelli y las autoridades vaticanas, que no descartan la posibilidad de nuevas complicaciones.
La comunidad internacional y los medios de comunicación continuarán atentos a las próximas declaraciones oficiales, mientras el Papa Francisco recibe los cuidados médicos necesarios en uno de los centros hospitalarios de referencia en Roma.