La majestuosa mantarraya fue capturada, medida, fotografiada y liberada con precaución por la tripulación.
NEW HAVEN, CT – El equipo de Long Island Sound Trawl Survey del Departamento de Pesca y Vida Silvestre de Connecticut hizo un descubrimiento sorprendente el pasado miércoles: una majestuosa raya que medía más de 6 pies de largo, 5 pies de ancho y pesaba aproximadamente 400 libras.
Las autoridades de Pesca y Vida Silvestre de Connecticut confirmaron que el imponente ejemplar es una raya áspera (Bathytosia centroura), conocida por ser un gigante gentil de los océanos.
Aunque las rayas de cola rugosa se distribuyen a lo largo de la costa atlántica desde Nueva Inglaterra hasta Florida, es relativamente raro avistarlas en las aguas de Long Island Sound.
Es importante señalar que todas las mantarrayas poseen una espina venenosa en su cola, pero no representan una amenaza, ya que no son agresivas. Además, suelen habitar aguas más profundas, lejos de las zonas donde las personas nadan y caminan.
Los expertos en vida silvestre de Connecticut explicaron que esta majestuosa mantarraya fue capturada, medida y fotografiada por la tripulación. Luego, con sumo cuidado, el animal fue devuelto al agua mientras la tripulación observaba su elegante partida mientras nadaba.
Además de la notable raya, el equipo de Pesca y Vida Silvestre también realizó otro hallazgo destacado: una cobia (Rachycentron canadum). Este pez depredador de gran tamaño puede alcanzar los 6 pies de longitud y pesar hasta 150 libras, según el Departamento de Pesca y Vida Silvestre de Connecticut.
Aunque la cobia se encuentra en todo el Océano Atlántico, su presencia está aumentando en Long Island Sound debido al cambio climático, que provoca el calentamiento de las aguas de la región.
El Departamento de Pesca y Vida Silvestre de Connecticut destacó que el equipo de Long Island Sound Trawl Survey se ha convertido en una herramienta invaluable para documentar el impacto del cambio climático en la región. Este equipo juega un papel fundamental en la preservación y comprensión de la vida marina en Long Island Sound, proporcionando datos cruciales para la protección del ecosistema marino en constante evolución.